No tengas miedo, emprende

Pues nada, que he vuelto gracias a la recomendación de mi querida tía Grisel, mis incondicionales padres y al apoyo de mi familia. Perdón el abandono pero muchas cosas se estaban ajustando. Hoy quiero invitarlos como siempre a retroalimentar. Este blog es de ustedes y para ustedes y lo escribo con la intención de que todos se vean beneficiados por la información que aquí se encuentre.

Quiero compartirles mi alegría por ver y conocer nuevos emprendedores, personas de diferentes edades con la necesidad o el deseo de emprender.

Emprender un negocio te da muchas satisfacciones, es como el nacimiento de un bebé, quieres verlo, abrazarlo, mimarlo y darlo a conocer a todo el mundo. 

Si estás a punto de emprender un negocio debes considerar dos cosas sumamente importantes: la primera que sea algo que te guste, que te interese, que te apasione y la segunda que sea un producto o servicio que realmente satisfaga la necesidad de un grupo de personas. He sabido muchos casos en los cuales el hobby de una persona con el tiempo se convierte en su sustento.

Mi reciente emprendimiento comenzó por la propia necesidad de mantenerme comunicada por más tiempo. Me dí cuenta de que la carga de mi teléfono duraba muy poco, investigué si existía en el mercado una solución para ese problema y me encontré con las fundas cargador. El siguiente paso fue investigar más sobre el producto y fue en ese momento cuando surgió la idea de comercializarlas. 

Realicé una pequeña investigación de mercado para conocer el número de personas que tenían esa misma necesidad. Investigué proveedores, tiempos de entrega y costos y me lancé a la aventura de la venta de accesorios para celular. 

Poco a poco iré profundizando en el tema de iniciar una empresa pero por lo pronto les dejo la inquietud de aventurarse a emprender y saber por donde empezar.

Espero sus comentarios, linda tarde.